El jueves 7 de julio a partir de las 10 horas se realiza el Encuentro «Sangres políticas: identidad, bio-poder y gobierno». La actividad es organizada por la Universidad de la República (Facultad de Humanidades: DAS, CEIU, CEIL; Facultad de Psicología: Instituto de Psicología Social), Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea, Centro de Estudios sobre la Identidad Colectiva (CEIC), Centre National de la Recherche Scientifique, y laboratorio Institut de Recherche Interdisciplinaire sur les Enjeux Sociaux (IRIS) de Francia; Labex Tepsis, y se desarrollará en el Aula Magna de la Facultad de Psicología (Tristán Narvaja 1674).
La jornada es una acción previa al encuentro internacional «Sangs politiques / Sangres políticas» Citoyenneté et biométrique en Europe et en Amérique Latine / Ciudadanías y biométrica en Europa y América Latina, que se realizará el 8 y el 9 de diciembre en la sala Maggiolo de la Udelar. Ambos encuentros reúnen un conjunto internacional y pluridisciplinar de investigadores en ciencias sociales y ciencias médicas para discutir sobre los efectos de la biología, las ciencias médico-legales y la biometría en las distintas maneras de entender la ciudadanía, los derechos colectivos e individuales, las políticas de identidad e identificación en América Latina y Europa.
El contexto exige abordar este debate: hoy, desde hace no más de una década, se ha multiplicado el uso de las tecnologías biométricas, omnipresentes en la administración ordinaria y extraordinaria del Estado: documentos de identidad, identificación de la ciudadanía, controles de población extranjera, administración de las poblaciones vulnerables, prevención de epidemias, políticas de la memoria y los derechos humanos, reclamos de reconocimiento de distinto tipo de colectivos y minorías (de género, étnicos…), test sanguíneos basados en el reconocimiento del ADN, bancos nacionales de ADN, mapas genéticos, inclusión de datos derivados de medidas biométricas (huellas digitales, reconocimiento del iris, scanner facial) en los documentos de identidad.
Para unos liberticidas, para otros científicas y por eso garantía de verdad, el uso de estas biotecnologías plantea no pocos problemas éticos, asociados al respeto de la intimidad, la objetivación del cuerpo, al marcaje y fichado de individuos y poblaciones. De igual modo, estos usos políticos de la sangre y de la biología nos conducen a preguntarnos por las razones y la legitimidad de la imposición del argumento biológico sobre todos los demás y sobre las consecuencias de esta deriva. Sea dentro de la puesta en marcha de políticas públicas del ámbito de la salud, en la «pasaportización» sistemática de los ciudadanos, en el marco de procedimientos administrativos o judiciales, en la conformación de nuestra(s) idea(s) de persona, o incluso en las demandas de reconocimiento de las poblaciones indígenas o las minorías sexuales, no podemos sino pensar que en este siglo XXI, la vieja biopolítica ha alcanzado, ciertamente, cotas impensables en esta alianza a gran escala entre la biología y las distintas formas de representar y de poner en práctica la ciudadanía.
Vea Programa
Entrada libre con inscripción previa a través del formulario